Ciudad Guayana.- En el primer trimestre del año la producción interna nacional mostró una leve mejoría, pero aún así las calles de la ciudad reflejan un alza desproporcionada en empleos con escasa remuneración adecuada.
Para el mes de mayo la tasa de desocupación se ubicó según datos oficiales del Instituto Nacional de Estadísticas en 8,2%, un punto más de lo registrado en abril y que para ese mes se tradujo en que 1.070.128 venezolanos con capacidad e intención de trabajar no tenían empleo.
La firma Econométrica en su informe “Estancamiento en tasa de empleo y empleos formales” recuerda que para el cuarto mes del año, el número de trabajadores con empleo informal fue 5.153.210, lo que dejó la tasa de informalidad en 42,3%, y el promedio de 12 meses se colocó cerca de 43,9%.
Aunque la consultora privada en materia económica reconoce que los niveles de desempleo “pueden considerarse relativamente bajos”, el sector informal tiene todavía un peso importante dentro de la población ocupada pues, “son más de 5.000.000 de personas que trabajan sin los beneficios y garantías que tienen todos aquellos que lo hacen de manera formal”.
Al respecto, estudios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) señalan que en América Latina la informalidad se ubica en un 55%, lo que implica que “no hay trabajo decente, por la ausencia de salarios adecuados, prestaciones sociales y derechos laborales, entre otros”.
Público
El análisis realizado por la consultora privada Econométrica destaca que el sector público tiene mayor peso en la generación de empleos. Los números muestran que para “abril 2001-abril 2011 el número de empleados del sector público pasó de 1.294.323 a 2.395.104, lo que equivale a un incremento de 1.100.781 trabajadores, un aumento de 85% en el mencionado período”.
Mientras que “el número de empleados del sector privado pasó de 7.699.428 en abril de 2001 a 9.800.590, en abril de 2011, es decir, un aumento de 2.101.162 trabajadores, o lo que es lo mismo, un 27,3% de incremento en el período”.
A pesar de que la población ocupada pasó de 8.993.751 a 12.195.694, un aumento de 3.201.943 trabajadores, Econométrica cuestiona en su informe la sustentabilidad en el tiempo de ese crecimiento.
Petróleo
La preocupación de que los niveles de empleo se mantengan en incremento es que “como en otros aspectos de la economía venezolana, la renta petrolera captada durante el período 2004-2008 tuvo una influencia en el comportamiento del empleo público”.
Los ingresos extraordinarios por la recuperación en la exportación de petróleo habrían permitido al Estado contar con los recursos para “comprar-expropiar” empresas de tamaño importante cuyos empleados pasaron a formar parte de la nómina pública.
En este punto destaca que el proceso de estatización no generó puestos de empleo, mas fue sólo una transferencia del sector privado al público. Otro factor que considera, es la creación de nuevos ministerios y otras instituciones que también jugaron un papel significativo en el aumento de 85% de empleos públicos.
Sustentabilidad
Los puntos antes señalados anteriormente -expropiaciones-compras de empresas y expansión de la nómina pública- según el análisis de Econométrica se ejecutaron sólo mediante los fondos recibidos de la renta petrolera.
De allí que, plantean que la estabilidad de todos estos puestos de trabajo, “¿se podrá sostener dicha nómina si llegara a ocurrir un descenso importante de los precios del petróleo?”. Visión en la que coinciden voceros empresariales del sector privado, como Fedecámaras que apuntan que bajo las actuales condiciones de inseguridad jurídica se dificulta la inversión y creación de empleos.
Líderes de los gremios coinciden en que el papel del Gobierno debe ser dictar y hacer cumplir las distintos estatutos legales. Pero, que sólo mediante una unión entre ambos sectores puede haber una generación de trabajos decentes, diversificación para la economía, mayor aporte para el fisco nacional y tener un crecimiento económico sustentable en el tiempo.
Consumo
En un país cuya capacidad productiva se ha limitado a la renta petrolera, con una producción en retroceso y con los precios que no pueden ser controlados, Econométrica destaca su preocupación sobre la relación entre crudo-empleo público-consumo privado.
Al respecto, recomiendan “diversificar la cartera de clientes a aquellas empresas que tengan dependencia al consumo de empleados públicos o actividades asociadas con éstos”.
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