Se consolidará modelo económico productivo, social y comunitario

Se consolidará modelo económico productivo, social y comunitario

Durante la gestión 2010-2015, se consolidará el modelo económico, productivo, social y comunitario que ejecuta la administración del presidente Evo Morales.

El ratificado ministro de Economía y Finanzas Públicas, Luís Alberto Arce, anunció que ese será uno de los objetivos de su gestión, además de industrialización de los recursos naturales.

Durante el acto de posesión, el Presidente Morales felicitó al Ministro Arce por haber logrado un superávit fiscal sostenido entre el 2006 y 2009, es decir que los ingresos del Estado fueron mayores que los egresos, según un informe oficial.

En esta nueva gestión de consolidación del Nuevo Modelo se mantendrá la estabilidad macroeconómica, se continuará con el crecimiento económico sostenido, la redistribución del ingreso a partir de la aplicación de políticas sociales y la implementación del Programa de Gobierno 2010-2015, dijo Arce.

Licenciado en Economía en la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), Arce Catacora también se graduó como Contador General en el Instituto de Educación Bancaria, recibió el grado de Master en Ciencias Económicas (MSc in Economics) de la Universidad de Warwick, Inglaterra. Realizó toda su carrera profesional en el Banco Central de Bolivia (BCB), desde 1987 hasta enero de 2006.

La primera vez que Arce Catacora asumió el cargo como Ministro de Hacienda, ahora Ministro de Economía y Finanzas Públicas, el martes 24 de enero de 2006, trazó los ejes de acción que realizaría durante su gestión: mantener la estabilidad macroeconómica, pero no a costa de la exclusión de las mayorías; profundizar el uso de la moneda boliviana (bolivianización), generar una conciencia tributaria, con la garantía de que los recursos serán correctamente utilizados, y estimular la demanda interna.

Cuatro años después, la agenda económica fue cumplida. Una de las primeras tareas, por su importancia era la de garantizar la estabilidad macroeconómica como patrimonio social. Luego de 66 años de permanente déficit fiscal, a partir de 2006, Bolivia logró superávit fiscal sostenido de 4,5%, en 2006; 1,7% en 2007; 3,2% en 2008; 0,1% estimado en 2009, de acuerdo al informe.

También se registró un constante crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de 4,8%, en 2006; 4,56% en 2007; 6,15% en 2008 (un récord) y 3,7% estimado en 2009, a pesar del contexto de crisis. El PIB per cápita (por persona) subió de 1.010 dólares registrados hace cuatro años a 1.651 dólares, en 2008. Asimismo, se controló la inflación, pese a algunos brotes especulativos que se dieron entre 2007 y 2008, en 2009 la inflación fue de 0,26%, la más baja en 45 años.

El tipo de cambio se mantuvo estable, lo que generó certidumbre en la población y se acumularon cifras históricas en Reservas Internacionales Netas (RIN) las que, en 2005 estaban en $us. 1.714 millones, y en 2009 cerraron en $us 8.580 millones.

La bolivianización frente al dólar generó confianza en el Boliviano y en la política desplegada por el Gobierno, una prueba de ello es que los depósitos en moneda extranjera, en el sistema bancario, bajaron del 84%, en 2005, a 53% a diciembre de 2009. Actualmente, la gente confía en la moneda boliviana, ahorra y realiza sus transacciones en Bolivianos. La moneda nacional fue valorizada.

En el ámbito tributario, se logró que los empresarios de las flotas de buses de transporte departamental paguen impuestos. Asimismo, las petroleras y las empresas privadas asumieron conciencia tributaria y cumplieron con sus impuestos, los resultados son elocuentes: en 2005, las recaudaciones tributarias llegaban a Bs 15.881 millones y para 2009 ascendieron a Bs 30.571 millones.

La buena gestión económica se tradujo en la redistribución de los ingresos a través del pago de los bonos que benefician a los sectores más vulnerables.

A diciembre de 2009, tres de cada diez personas recibió un bono, sea el Juancito Pinto, Juana Azurduy o Renta Dignidad. El resultado de esta política es que el consumo interno de servicios como la energía eléctrica, el gas, el agua registró un incremento notable, lo que da cuenta de una mejora en la calidad de vida de los bolivianos y también permitió activar la demanda interna.

En estos cuatro años de gestión, se sentaron las bases para el nuevo modelo económico con la creación y apoyo a las nuevas empresas estatales, así como la priorización de la inversión pública antes que el gasto corriente. En este marco, se creó el Banco de Desarrollo Productivo (BDP) que canaliza créditos en bolivianos a los medianos, pequeños y micro productores.

La reducción de la deuda externa, destaca también la gestión económica. En 2005, la deuda externa era de $us. 4.942 millones y bajó a $us. 2.585 millones, en 2009.