Por ISTRA PACHECO
MEXICO (AP).— Las mujeres en América Latina siguen siendo más vulnerables al desempleo y al discrimen salarial, pero cuando tienen trabajo generan un efecto multiplicador en la economía mucho mayor que el de los hombres y reducen la pobreza general de los países.
El presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Luis Alberto Moreno, dijo el viernes que la tasa de desempleo entre las mujeres en América Latina es de 6.3%, comparada con la tasa entre hombres que es de 3.7%.
Sin embargo, el ingreso de las féminas es tan determinante que si no ganaran nada, el nivel de pobreza sería del 40% en lugar del 26% que se registra actualmente en hogares con ambos padres, según un estudio comisionado por el BID.
“La rápida incorporación de las mujeres al mercado laboral representa una de las transformaciones sociales más trascendentales que experimentan todas las sociedades de nuestra región“, dijo el funcionario en un seminario paralelo a la reunión anual del BID en Cancún.
“La participación laboral femenina ha pasado de un 35% en el año 1980 a más del 53% hoy en día... (pero) más participación tendría efectos considerables en la reducción de la pobreza“ porque con su salario aportan más a la educación de sus hijos y su nutrición, lo que redunda en un mayor bienestar social, explicó.
Además las mujeres tienen una desventaja salarial del 17% al 25% en comparación con los hombres, aunque realicen el mismo tipo de tareas, según apunta el estudio.
Moreno criticó asimismo que aún los empleos para las mujeres siguen siendo mayoritariamente en la economía informal, en sectores de baja productividad, y hay pocos cargos ejecutivos disponibles para ellas dentro de las empresas.
“Menos del 3% de las mujeres son líderes en las 100 empresas más grandes... son una sociedad minoritaria en un club que sigue siendo mayormente masculino“, destacó.
A su juicio, se necesita una mayor capacitación de las mujeres e integrarlas en nuevas y más importantes áreas de trabajo.
Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) pidió mejores políticas públicas para incentivar lo que denominó la “economía de cuidado“, como guarderías para niños y mayores de edad.
Y es que las labores domésticas siguen recayendo mayormente sobre las mujeres. Por ello, es más difícil que encuentren trabajo o, pero aún, cuando terminan sus jornadas diarias, tienen que encargarse de cuidar a otros.
“Eso no se vale. El estado tiene un papel fundamental en esto y... (debe generar) políticas activas para crear guarderías, para que haya centros de adulto mayor, para que haya de verdad esa institucionalidad de apoyo a las mujeres“, declaró.
La primera dama mexicana Margarita Zavala reconoció que en el país sigue habiendo una gran discriminación laboral y salarial contra las mujeres, debido a prejuicios, y recordó que una lista de la revista económica Expansión sobre las 50 mujeres más exitosas económicamente en México, 45 tenían hijos.
“Esa idea de que tener familia, de que tener hijos y casarse es un obstáculo para contratar o creer en la capacidad de las mujeres, por supuesto que es una idea absurda“, señaló.
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