Martes 9 de junio de 2009.
Es un tema que conjuga el orden de la ciudad con la economía: el comercio ambulante. Cada cierto tiempo vuelve a la palestra como ocurrió en la reciente celebración del Día del Comercio, donde se transparentaron diversas posturas. En este aspecto, el municipio ha asumido una propia a través de una nueva ordenanza, lejana a conceptos de erradicación y más cercana a la idea de reubicación.
un nuevo orden.
Dentro del municipio se ha observado una creciente solicitud de permisos para ejercer el comercio ambulante. Diariamente se observan solicitudes. “Se han otorgado permisos muy puntuales viendo la ficha de protección social y ubicando no en las partes más congestionadas”, señala la jefa de gabinete Paola Becker, adelantando de alguna forma lo que plantea la nueva ordenanza sobre este tema. “Ordenar el comercio ambulante y estacionado en la comuna, sobre todo dentro de las cuatro avenida. Van a quedar expresamente designadas las calles donde no se van a poder ubicar por razones de tránsito, urbanismo y concentración de delicuencia”, puntualizó Becker.
De hecho, quedarán establecidos de forma clara los requisitos que los comerciantes deberán cumplir y no se permitirá el uso de estructuras urbanas como barreras. Esta limitación de calles va a implicar una ineludible reubicación de comerciantes que generalmente abogan por las calles más céntricas.
El curso de la nueva ordenanza es la presentación al Concejo, el cual la debe conocer para su posterior entrada en vigencia, que no será antes de comienzos del próximo año. Todo esto considerando un período de marcha blanca orientado a dialogar con los distintos comerciantes. “El concepto preciso es reubicar, pero no se trata de reubicar y ponerlos a tres kilómetros de los lugares. Nadie los quiere tirar a cualquier parte. Las soluciones se hacen en conjunto”, aclaró el alcalde Sergio Zarzar.
proceso de renovación.
Por otra parte, dentro de la ordenanza también se contempla ideas de mejoramiento para aquellos comerciantes que queden instalados a través de un sistema de cofinancimiento. “Estamos buscando los modelos más eficientes para mejorar el comercio en la calle, tanto para el comerciante, mejorando su vitrina y también para que se vea un ordenamiento en la ciudad, algo atractivo”, precisa Paola Becker. El propósito es dejar plasmada esta propuesta en la ordenanza. Si no es posible incluirla se considera al menos establecer sugerencias de espacio e infraestructura para el mejoramiento de este tipo de comercio.
Al mismo tiempo dentro de la ordenanza se contempla el establecimiento de excepciones, tomando en cuenta fechas claves como el Día de la Madre y Navidad, que implica un aumento ostensible de la actividad comercial.
posturas divididas.
“He estado toda mi vida trabajando en esto no tengo ningún sueldo, solamente lo que se gana aquí”, comenta Margarita Gutiérrez, quien en la esquina de Arauco y El Roble se dedica por estos días a la venta de membrillos. Su planteamiento confirma la voz de un creciente número de comerciantes estacionales que ven en esta alternativa la opción de subsistencia para sus hogares. Para Margarita, la opción de un nuevo ordenamiento es positiva considerando la posibilidad que entrega de estructurar el centro, sin dejar de lado esta actividad.
“Sería excelente una ordenanza, pero lo primero es apoyar a la gente de aquí, que toda la vida ha trabajado en el centro. Ahora se ve más gente en la calle, como no hay trabajo, la gente no tiene otra cosa que hacer. También se ve más desordenado por eso lo que haría sería colocar unos carritos por aquí y por allá como en Santiago y en Concepción”.
Como contraparte, el comercio establecido considera que esta nueva ordenanza no es la solución categórica que se ha abogado por años. “Nosotros nos oponemos a todo permiso que permita que se ejerza el comercio en la vía publica.
El comercio debe ser ejercido en un local comercial con ciertas características, que deba tributar, el resto es una competencia desleal. Valoramos el ordenamiento, pero nuestra aspiración es que no exista comercio en la vía publica, no estamos contento con esa solución alternativa. Para nosotros la solución es la erradicación del comercio en la vía pública”, señaló Alejandro Lama, director de la Cámara de Comercio. Son las miradas que surgen ante una nueva decisión de ciudad. .
Es un tema que conjuga el orden de la ciudad con la economía: el comercio ambulante. Cada cierto tiempo vuelve a la palestra como ocurrió en la reciente celebración del Día del Comercio, donde se transparentaron diversas posturas. En este aspecto, el municipio ha asumido una propia a través de una nueva ordenanza, lejana a conceptos de erradicación y más cercana a la idea de reubicación.
un nuevo orden.
Dentro del municipio se ha observado una creciente solicitud de permisos para ejercer el comercio ambulante. Diariamente se observan solicitudes. “Se han otorgado permisos muy puntuales viendo la ficha de protección social y ubicando no en las partes más congestionadas”, señala la jefa de gabinete Paola Becker, adelantando de alguna forma lo que plantea la nueva ordenanza sobre este tema. “Ordenar el comercio ambulante y estacionado en la comuna, sobre todo dentro de las cuatro avenida. Van a quedar expresamente designadas las calles donde no se van a poder ubicar por razones de tránsito, urbanismo y concentración de delicuencia”, puntualizó Becker.
De hecho, quedarán establecidos de forma clara los requisitos que los comerciantes deberán cumplir y no se permitirá el uso de estructuras urbanas como barreras. Esta limitación de calles va a implicar una ineludible reubicación de comerciantes que generalmente abogan por las calles más céntricas.
El curso de la nueva ordenanza es la presentación al Concejo, el cual la debe conocer para su posterior entrada en vigencia, que no será antes de comienzos del próximo año. Todo esto considerando un período de marcha blanca orientado a dialogar con los distintos comerciantes. “El concepto preciso es reubicar, pero no se trata de reubicar y ponerlos a tres kilómetros de los lugares. Nadie los quiere tirar a cualquier parte. Las soluciones se hacen en conjunto”, aclaró el alcalde Sergio Zarzar.
proceso de renovación.
Por otra parte, dentro de la ordenanza también se contempla ideas de mejoramiento para aquellos comerciantes que queden instalados a través de un sistema de cofinancimiento. “Estamos buscando los modelos más eficientes para mejorar el comercio en la calle, tanto para el comerciante, mejorando su vitrina y también para que se vea un ordenamiento en la ciudad, algo atractivo”, precisa Paola Becker. El propósito es dejar plasmada esta propuesta en la ordenanza. Si no es posible incluirla se considera al menos establecer sugerencias de espacio e infraestructura para el mejoramiento de este tipo de comercio.
Al mismo tiempo dentro de la ordenanza se contempla el establecimiento de excepciones, tomando en cuenta fechas claves como el Día de la Madre y Navidad, que implica un aumento ostensible de la actividad comercial.
posturas divididas.
“He estado toda mi vida trabajando en esto no tengo ningún sueldo, solamente lo que se gana aquí”, comenta Margarita Gutiérrez, quien en la esquina de Arauco y El Roble se dedica por estos días a la venta de membrillos. Su planteamiento confirma la voz de un creciente número de comerciantes estacionales que ven en esta alternativa la opción de subsistencia para sus hogares. Para Margarita, la opción de un nuevo ordenamiento es positiva considerando la posibilidad que entrega de estructurar el centro, sin dejar de lado esta actividad.
“Sería excelente una ordenanza, pero lo primero es apoyar a la gente de aquí, que toda la vida ha trabajado en el centro. Ahora se ve más gente en la calle, como no hay trabajo, la gente no tiene otra cosa que hacer. También se ve más desordenado por eso lo que haría sería colocar unos carritos por aquí y por allá como en Santiago y en Concepción”.
Como contraparte, el comercio establecido considera que esta nueva ordenanza no es la solución categórica que se ha abogado por años. “Nosotros nos oponemos a todo permiso que permita que se ejerza el comercio en la vía publica.
El comercio debe ser ejercido en un local comercial con ciertas características, que deba tributar, el resto es una competencia desleal. Valoramos el ordenamiento, pero nuestra aspiración es que no exista comercio en la vía publica, no estamos contento con esa solución alternativa. Para nosotros la solución es la erradicación del comercio en la vía pública”, señaló Alejandro Lama, director de la Cámara de Comercio. Son las miradas que surgen ante una nueva decisión de ciudad. .
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