SANTO DOMINGO.- El Centro de Estudios Sociales Padre Juan Montalvo, consideró ayer inadecuadas las propuestas del empresariado para solucionar los problemas de la oferta y la demanda de trabajo.
Señalan que con dicha propuesta lo que hacen es formar un escenario que pretende dar una imagen de víctima del sector empresarial, enfocando las cámaras en el drama de las pérdidas de competitividad y no en los más de 70 mil dominicanos que han perdido su empleos.
La inquietud del Centro de Estudios Sociales Juan Montalvo, fue externada durante el panel titulado “Vulnerabilidad en el centro laboral en la República Dominicana”, donde comparecieron miembros del Servicio Jesuita a Refugiados y Migrantes, Marta González, de la Secretaría de Trabajo, Manuel Cabrera, entre otros.
Expresaron que los empresarios deben estar dispuesto a compartir la carga de la crisis económica internacional, ya que el peso no puede recaer sobre las personas trabajadoras, que ya de por sí tienen el salario más bajo de América Latina, reduciendo las conquistas laborales de años de lucha sindical.
Manifestaron que la situación se hace aún más cuesta arriba cuando se observa al gobierno central con propuestas mínimas y programas prácticamente de carácter asistencial que no resuelven los altos niveles de desempleo registrados y la alta tendencia de crecimiento del sector informal.
Explicaron que ante la eminente crisis que se observa en el sector laboral suelen tomarse acciones que afectan el sector de los trabajadores, buscando resolver problemas de competitividad y que no se puede resolver estos problemas a base de bajos salarios o afectando las condiciones laborales.
Indicaron que seria necesario reflexionar la posibilidad de sustituir las importaciones por producto nacional, de forma que la producción interna permita el movimiento del empleo y la formalización del trabajo sobre todo en el sector agropecuario. Esto pasa por la protección y el fomento del producto interno.
Apuntaron que es necesario revisar los acuerdos contractuales del gobierno dominicano con las empresas que hacen de alguna forma inversión extranjera directa, de forma que se comience a hacer exigencias concretas para la mejora del empleo, sobre su relación con el medio ambiente y la integración horizontal con el territorio y el empresariado nacional.
Señalan que con dicha propuesta lo que hacen es formar un escenario que pretende dar una imagen de víctima del sector empresarial, enfocando las cámaras en el drama de las pérdidas de competitividad y no en los más de 70 mil dominicanos que han perdido su empleos.
La inquietud del Centro de Estudios Sociales Juan Montalvo, fue externada durante el panel titulado “Vulnerabilidad en el centro laboral en la República Dominicana”, donde comparecieron miembros del Servicio Jesuita a Refugiados y Migrantes, Marta González, de la Secretaría de Trabajo, Manuel Cabrera, entre otros.
Expresaron que los empresarios deben estar dispuesto a compartir la carga de la crisis económica internacional, ya que el peso no puede recaer sobre las personas trabajadoras, que ya de por sí tienen el salario más bajo de América Latina, reduciendo las conquistas laborales de años de lucha sindical.
Manifestaron que la situación se hace aún más cuesta arriba cuando se observa al gobierno central con propuestas mínimas y programas prácticamente de carácter asistencial que no resuelven los altos niveles de desempleo registrados y la alta tendencia de crecimiento del sector informal.
Explicaron que ante la eminente crisis que se observa en el sector laboral suelen tomarse acciones que afectan el sector de los trabajadores, buscando resolver problemas de competitividad y que no se puede resolver estos problemas a base de bajos salarios o afectando las condiciones laborales.
Indicaron que seria necesario reflexionar la posibilidad de sustituir las importaciones por producto nacional, de forma que la producción interna permita el movimiento del empleo y la formalización del trabajo sobre todo en el sector agropecuario. Esto pasa por la protección y el fomento del producto interno.
Apuntaron que es necesario revisar los acuerdos contractuales del gobierno dominicano con las empresas que hacen de alguna forma inversión extranjera directa, de forma que se comience a hacer exigencias concretas para la mejora del empleo, sobre su relación con el medio ambiente y la integración horizontal con el territorio y el empresariado nacional.
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