miércoles, 18 de marzo de 2009

La economía sumergida ha crecido un 36% desde enero

ANA MARÍA MICÓ | SANTA CRUZ DE TENERIFE La contratación irregular repunta a medida que avanza la crisis. Un ejemplo de ello es la alarma que ha creado el elevado aumento de trabajos de economía sumergida que han surgido en este último año, entendiendo ésta como el sistema de intercambio de bienes que permanece ajeno al control del Estado. Por su naturaleza (la imposibilidad del Estado de cuantificarla), no está incluida en el Producto Nacional Bruto (PNB), a diferencia de la economía formal.

Según el Gabinete Técnico de Economía Sumergida y Empleo Irregular de Comisiones Obreras Canarias (CC OO), la economía sumergida y las irregularidades de contratación en las Islas ha crecido un 146% en este trimestre del año con respecto al mismo período del año anterior y, un 36% en lo que va de año.

Es más, una de las responsables de este gabinete de CC OO, Maribel Gil, explica que "se están dando más casos denunciados en estos 15 quince días de marzo, que en los meses de enero y febrero juntos".

Aunque la economía informal se ha asociado frecuentemente a países en desarrollo y economías emergentes, todos los sistemas económicos participan en algún grado en las economías sumergidas existentes a escala local. En España supone el 20 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) y en Canarias el porcentaje se sitúa entre un 20 y un 30 por ciento.

Unos datos que resultan alarmantes porque implican la pérdida de derechos por parte de los trabajadores y, en particular, de muchas mujeres que no tienen más remedio que aceptar el empleo, aunque sea sin contrato, al encontrarse su pareja en paro.

En contra de lo que ocurría hace dos años, la hostelería está generando una bolsa de economía sumergida que representa más del 20 por ciento del total de casos denunciados en dos meses y medio, que han sido unos 74.

Maribel Gil señala que "la construcción se encuentra en una situación tan deplorable que ha provocado un aumento de despidos que pueden ser irregulares pero no de casos de economía sumergida", ya que ésta representa menos del 20% de los casos denunciados. Relacionado con las irregularidades que se han cometido en el sector en estos diez años de bonanza, Comisiones Obreras denuncia que las peores condiciones las tienen ahora los que se jubilan o prejubilan en la construcción pues apenas perciben 500 euros al mes dado que desconocían que, a pesar de estar cobrando hasta 2.000 euros al mes, su salario base era de 700 euros. "Acuden a nosotros desesperados porque muchos de ellos son todavía jóvenes con hijos a su cargo".

La desprotección en esta actividad económica alcanza también a los que tiene un contrato regular. Comisiones advierte de que a muchos trabajadores se les descuenta de la nómina las actuaciones realizadas en prevención de riesgos laborales y vestuario relacionado con la prevención de accidentes.

Al sector de la construcción le precede el de servicios y, en concreto, el comercio, donde se suceden los casos de horas extras sin pagar a empleados que tiene contratos temporales de dos semanas y que realizan el trabajo de dos personas.

Además, el subsector del metal es también un ámbito con un elevado número de personal y trabajadores por cuenta propia irregulares. Desde Femete denuncian que, al menos 1.300 empresas en Canarias, se encuentran en esta situación tanto en lo que afecta a los trabajadores como a las pymes.

El 72% son hombres

Desde el mes de enero de 2008, fecha en que el Gabinete Técnico de Economía Sumergida de CC OO (www.economiasumergida.es) comenzó a recibir denuncias, han recogido un 72% de denuncias efectuadas por hombres y un 28% realizadas por mujeres. En cuanto a los intervalos de edad, el grupo de edad que más denuncias ha realizado es el de 30 a 44 años, con un 68% de las denuncias, siguiéndole con un 24% el intervalo de edad de 16 a 29 años.
Estos datos son importantes para el sindicato porque ayudan a conocer la naturaleza del denunciante y de la empresa.

Además, el Gabinete Técnico de CC OO recibe no sólo las denuncian de sus afiliados, sino también la de todos aquellos trabajadores que quieren hacer valer sus derechos.
La labor de este departamento es asesosar y sensibilizar a las instituciones públicas y a los empresarios de que las irregularidades en las contrataciones causan perjuicios a toda la sociedad.
Uno de los trabajos más importantes del sindicato es actuar como mediador entre la empresa y la Inspección de Trabajo, verificando todas aquellas denuncias que salen a la luz y actuando como filtro con el claro objetivo de defender los derechos de los trabajadores.

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