La ilegalidad se manifiesta bajo diversas formas. Las denominadas “ferias americanas” son en centro de las quejas de los comerciantes salteños.
El comercio informal, que se manifiesta fundamentalmente en los mercados de pulgas, el contrabando ilegal de mercaderías desde Bolivia y las denominadas “ferias americanas”, constituye una problemática que ya comenzó afectar la economía de toda la provincia, según la visión de los comerciantes en un extremo y otro del territorio salteño.
Los empresarios denuncian la falta de acción por parte de los órganos de control y en este sentido remarcaron que, de seguir así, la situación de los comercios legales puede verse gravemente afectada y terminará, indefectiblemente, en el cierre de comercios con las consecuencias sociales que esto implica, tanto desde el punto de vista productivo como laboral.
Las llamadas “ferias americanas” constituyeron, en su momento, una alternativa para los sectores más vulnerables, que encontraban allí, precios accesibles para cubrir sus necesidades. Sin embargo, y con el correr del tiempo, este tipo de comercio se fue diversificando y extendiendo por las principales ciudades de la provincia. Hoy los comercios legales atraviesan por una problemática situación ya que, en muchos casos, les es imposible mantenerse frente a una competencia a la que consideran “ilegal”.
El reclamo
El problema adquirió relevancia pública tras una decisión judicial en la ciudad de Metán, mediante la cual se autorizó el funcionamiento de una “feria americana” dos fines de semana por mes. Esta situación tuvo su impacto entre feriantes del Valle de Lerma y el norte provincial, quienes temen que la medida siente precedentes jurídicos en otros lugares donde el comercio formal se vea amenazado por esta actividad.
Algunos comerciantes consultados tomaron distancia y criticaron el fallo de la Justicia, asegurando que “la medida avala un delito a medias, ya que la Justicia debe definir si las ferias son legales o ilegales. No podemos avalar una resolución judicial ‘gris’, como la que se produjo en Metán”. Para la próxima semana se espera un pronunciamiento oficial de la Cámara de Comercio e Industria de Salta.
Efectos en el norte
Comerciantes y empresarios del norte salteño también reclamaron contra la permisividad frente a la violación de las normas que, según dijeron, sólo contribuye a la destrucción de la seguridad jurídica y de las posibilidades de desarrollo sustentable con pleno empleo, que es la prioridad para el norte salteño.
“Lo que necesitamos es una fuerte intervención del Estado. Pareciera que trabajar en la formalidad es un castigo, porque somos los que recibimos inspecciones y una pesada carga impositiva”, dicen los comerciantes en las áreas de frontera.
El potencial de Orán
Lo comerciantes y empresarios de Orán expresaron su confianza en que la situación cambiaría si el potencial laboral del departamento estuviera capacitado para satisfacer la enorme oferta del sector agroindustrial y agroforestal, que les brindaría mejores condiciones de vida.
“Hoy ese espacio lo ocupa una gran masa de obreros bolivianos”, explicaron.
En ese sentido, se vislumbra la posibilidad de ofrecer en la ciudad, tecnicaturas que apunten a cubrir las reales necesidades de la economía local.
En ese sentido, el diputado Marcelo Bernard anticipó que se realizan tratativas con la Universidad Nacional de Salta para que se brinden carreras relacionadas con la agroforestación.
“Necesitamos que se desarrolle la producción lo que ayudaría a resolver la problemática del contrabando, la ilegalidad y la informalidad”, aseguró.
Sin embargo, en el corto plazo el titular de la Cámara de Comercio, Mauricio Loutaif, señaló que en primera instancia, y para menguar en parte el daño que está sufriendo el sector, hace falta una intervención urgente del Estado en la frontera y se tomen medidas de fondo para combatir la ilegalidad.
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