El empleo informal generado durante el 2009 ayudó a aminorar la presión económica para las familias mexicanas, aseguró BBVA Bancomer.
Al presentar el estudio “Situación de México”, Jorge Sicilia, economista en jefe para América de Norte de BBVA, comentó que si bien la economía del país se recuperará en función del crecimiento de sus exportaciones, principalmente hacia EU, el empleo informal ha sido una válvula de escape que le permite mantener ingresos a los ciudadanos del país.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del INEGI, el número de personas en el empleo informal durante el 2009 ascendió a 12.6 millones de personas, lo que significó un aumento de 8% o 938,000 personas respecto de lo registrado en el 2008.
“Sin embargo, este tipo de trabajos no es apto para la economía en su conjunto, ya que genera poca productividad, además de que retrasa el potencial del crecimiento de México”, dijo Sicilia.
Reformas estructurales
Por otro lado, el directivo comentó que ajustaron sus expectativas de crecimiento para el PIB de México a 3.8% en el 2010, desde 3.1% que se tenía estimado hace cuatro meses.
Asimismo, comentó que esperan una tasa de desempleo de 4.9% al cierre del 2010, comparada con 5.8% registrado en el cuarto trimestre del 2009.
Consideró que si bien la recuperación se dará de forma estable, no se han hecho las reformas necesarias para que la economía presente un desarrollo sustentable.
“México no ha sido afectado estructuralmente con la crisis; sin embargo, no ha hecho nada para crear las reformas que lo tienen detenido”, aseguró Sicilia.
Finalmente explicó que de los sectores más beneficiados en esta recuperación serán los que están más ligados a la industria.
ehuerfano@eleconomista.com.mx
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