La dura condición femenina

Artículo publicado el 08/03/2009 Ultima reactualización 08/03/2009 12:25 TU

Las mujeres sufrirán más el desempleo que los hombres en 2009 debido a la crisis económica, según la OIT
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Las mujeres sufrirán más el desempleo que los hombres en 2009 debido a la crisis económica mundial, según un informe de la Organización Internacional del Trabajo En su informe anual Tendencias Mundiales del Empleo de las mujeres publicado con motivo del Día Mundial de la Mujer, la OIT pronostica que esta crisis podría generar 22 millones de desempleadas este año. Una tendencia preocupante en la región de América Latina y el Caribe donde 30% de los hogares están bajo el mando de una mujer.

El informe de la OIT señala que de las 3.000 millones de personas en todo el mundo que ocupaban un empleo en 2008, 1.200 millones son mujeres (40,4%). Pero en 2009 unas 22 millones de empleadas podrían pasar a engrosar las filas de desempleados como consecuencia de la crisis financiera.

La región de América Latina no escapará a esta tendencia pues, según estima el mismo organismo, en 2009 el número de desocupados podría llegar a 24 millones de personas. De esas cifras, entre 40% y 50% podría ser mujeres, según María Elena Valenzuela, especialista en sexo y empleo de la OIT para la región.

A esto suma el hecho de que en América Latina existe actualmente una gran distancia en materia de desempleo entre los dos géneros: 5,8% de hombres desempleados contra 9,3% de mujeres. Así, América Latina y el Caribe se ubica entre las regiones del mundo con mayor brecha entre ambos grupos.

La OIT también destaca en su informe que, según lo observado en crisis económicas pasadas, las mujeres tienden a estar más afectadas debido a una serie de variables (sociales, culturales, económicas) que pueden generar mayor profundización de las desigualdades de género.

La actual crisis y la ola de despidos que ha generado en todo el mundo, podría tener consecuencias sociales preocupantes en el conjunto de países latinoamericanos donde, en promedio, un tercio de los hogares tiene como jefe a una mujer. Agrega Valenzuela que la familia típica de América Latina ya no es aquella que tiene al padre como única fuente de ingresos y a la madre a cargo de los niños y el hogar. Hoy día se ha impuesto un modelo en donde ambos progenitores trabajan.

Si más mujeres que tenían un empleo formal pasan a engrosar las cifras de desempleados es probable que muchas de ellas se trasladen al sector informal como estrategia de supervivencia. Otro fenómeno inquietante dado que muchos empleos informales carecen de protección social y de ingresos estables. El servicio doméstico, por ejemplo, que representa 15,5% del total del empleo femenino del subcontinente, está en expansión. De hecho, el estudio confirma que las mujeres continúan en desventaja en lo que se refiere a la protección social. La mayoría de las mujeres de América Latina con más de 65 años no recibe jubilación ni ninguna otra forma de pensión porque pasaron toda su vida adulta haciendo trabajo doméstico no remunerado y labores del hogar. "La segregación laboral que confina a las mujeres en los niveles menos privilegiados continúa existiendo", concluye la experta de la OIT María Elena Valenzuela.

Por la igualdad profesional
Varias cientos de personas manifestaron el sábado en París para defender los “derechos de las mujeres”, entre ellos el derecho al aborto y el derecho a la igualdad de remuneración. Según denunciaron dos economistas del centro de Investigaciones económicas de la escuela de ciencias sociales de París, Françoise Milewski y Hélène Périvier, la ola actual de desempleados en Francia está constituida principalmente de hombres pues la gran mayoría de empleos suprimidos concierne el sector industrial. Pero las mujeres, afectadas en mayor medida por los contratos a medio tiempo y precarios, podrían ser las más afectadas por las medidas que toman las empresas para enfrentar la crisis (desempleo parcial, reducción de horas de trabajo, etc).

Las dos investigadoras destacan también que la crisis podría relegar al último plano el tema de la igualdad profesional. La militante feminista y escritora Alicia Conde, declaró a RFI que sigue habiendo problemas, incluso en países como Francia. “En las sociedades desarrolladas, siguen imperando un sistema generalizado de poder según el origen social, económico, el género y el color de la piel. Allí la mujeres siguen sufriendo de disparidad en los salarios, los puestos de poder siguen en manos de los hombres, sea en el ámbito político o en el empresarial”, deplora Conde.