Con el fin de desmitificar los altos índices de empleo anunciados por el Gobierno, la Fundación Sol, basándose en los datos del Instituto Nacional de Estadística, cuestionó la información entregada el pasado 21 de mayo en la cuenta pública y aseguró que la mayoría de los puestos de trabajos creados son de mala calidad.
Esta situación se explicaría principalmente por los cambios de criterio aplicados por el INE para equipararse a los instrumentos de medición que exige la OCDE, lo que permitió incorporar trabajos que antes no eran considerados como tales, como los temporales o a contrata.
La idea es constatar los cambios que se produjeron en el mercado laboral incluyendo ámbitos como la flexibilización, subcontratación y precarización.
Según las cifras oficiales la tasa de desocupación alcanzó un siete por ciento, la más baja de los últimos 25 meses. Sin embargo, hay expertos que indican que este número contiene fenómenos ocultos detrás de la modificación metodológica que caracteriza a una persona como “ocupada”. Por eso ahora la pregunta es simplemente “si realizó algún trabajo”.
Los especialistas advierten que la disminución de la desocupación se debe a un gran aumento del subempleo (trabajadores que desean trabajar más tiempo del que laboran, pero que no encuentran tal fuente laboral), fundamentalmente entre las mujeres y en regiones afectadas por el terremoto y maremoto.
La Agencia Sol señala que mientras el Gobierno informa que existen 558 mil desempleados, los estudios integrales, que no incluye trabajos de mala calidad, genera una cifra de desempleo de 992 mil personas.
Según el economista, Marco Kremerman, el tema de fondo pasa porque, con el tiempo, el perjudicado es el empleado con la informalidad y flexibilidad laboral.
“Está ocurriendo esta discusión bizantina de tratar de empatar tranzando, por ejemplo la indemnización por años de servicio contra el seguro de desempleo. El juego es yo concedo esto si tú me concedes lo otro. Sin embargo, tenemos un nivel de desprotección y derechos laborales muy precarios todavía. Si uno analiza los derechos colectivos Chile es uno de los casos único a nivel mundial donde tenemos la definición del concepto de empresa, que permite los multirut. Cuando se analiza el derecho a huelga también nos damos cuenta que en nuestro país es prácticamente inexistente”, comentó el especialista.
Kremerman agregó que en África, por ejemplo, existe un nivel de desempleo de 0,3 por ciento, pero la mayoría de los trabajos son absolutamente informales.
Respecto a la calidad de empleos sólo un 38, 9 por ciento del total de ocupados presentan un empleo protegido, es decir con contrato escrito, indefinido, liquidación de sueldos y cotización para salud pensión y seguro de desempleo.
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