El Sol de Cuautla
31 de octubre de 2009
Gabriela Martínez
Cuautla, Morelos.- Más de 800 comerciantes ambulantes fueron capacitados por la Dirección Municipal de Salud en la preparación y manejo de alimentos que se venden en la vía pública, a fin de garantizar que cumplan con las medidas higiénicas necesarias para evitar enfermedades entre los consumidores. El director de Desarrollo Humano y Social del Ayuntamiento de Cuautla, Andrés López Carrillo, aseguró que estas acciones son permanentes y se realizan hasta el último día de la presente administración.
Agregó que la dependencia realiza de manera permanente actividades de revisión a los comerciantes ambulantes que venden alimentos en la vía pública, principalmente sobre aquellos que fueron capacitados en el manejo correcto de la comida. Además de estas acciones, también se les realizan los análisis necesarios para garantizar que no sean portadores de enfermedades.
La Dirección Municipal de Salud ha centrado su atención en los ambulantes de alimentos que se ubican en las inmediaciones de las instituciones educativas, terminales de autobuses y balnearios de la ciudad, donde se registra el mayor consumo y por lo tanto, es más alto el riesgo de enfermedades entre los consumidores.
Andrés López Carrillo refirió que al consumir en un puesto callejero, las personas deben cerciorarse primero que el lugar se encuentre limpio, además de verificar que el personal encargado de la preparación de los alimentos no use joyería, porte mandil, cubre pelo y cubre boca, tenga las uñas recortadas y no manipule al mismo tiempo dinero y alimentos.
Agregó que los ambulantes que fueron capacitados por la dependencia cuentan con una tarjeta de salud que garantiza a los consumidores que se trata de un puesto que cumple con las medidas de higiene.
Consideró necesario que la próxima administración municipal, que está por iniciar funciones la semana entrante, dé continuidad a este programa de capacitación a los comerciantes ambulantes de alimentos y se extienda al comercio en general a fin de disminuir riesgos de enfermedades entre las personas que acostumbran alimentarse en la vía pública.
Y es que todavía es alto el número de comerciantes que se dedican a la venta de comida sin cumplir con las normas de higiene que exige la Secretaría de Salud, por lo que siguen creciendo los casos de padecimientos gastrointestinales y diarreas
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