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Según SEL Consultores, las paritarias cubrirán al 45% de la población ocupada. Empleados informales no lograrían aumentos acordes con las subas de precios este año. En Tucumán son cuatro de cada diez trabajadores.

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El salario real de los empleados no registrados podría reducirse este año debido a las presiones inflacionarias.

Según señaló en un informe la Sociedad de Estudios Laborales (SEL), “la capacidad de acción salarial colectiva –con soporte político, además- cubre no mucho más de 40% (a lo sumo 45%) de la población ocupada”, indicó el documento.

En Tucumán están en el sector laboral informal 244.800 trabajadores, si se estima que la masa laboral, según el doctor Jorge Víctor Elías, es de unas 600.000 personas.

“Es muy probable que el salario real de los informales caiga este año, tanto más cuanto más precario sea el empleo y mayor su concentración en los estratos inferiores”, agregaron los expertos de la consultora que dirige Ernesto Kritz.

Asimismo, el estudio afirmó que los trabajadores ocupados informales, de los estratos económicos inferiores, muchos de los cuales tienen un empleo de alta rotación, carecen de una capacidad de negociación semejante a la de los asalariados registrados.

“Es difícil que obtengan mejoras salariales con base en la inflación esperada. Si, como es posible, reciben alzas en línea con la inflación pasada, podría haber un desfase superior a 5 puntos con las que acuerden los asalariados registrados”, sostuvo.

En cambio, los empleados bajo convenio o registrados pueden reajustar sus remuneraciones por primera vez en línea con la inflación esperada para este año, ya que en los años previos lo hacían en base a la suba de precios del año pasado, según estimó SEL.

El trabajo explicó que, pese a la pérdida de puestos formales durante la recesión reciente, “el desempleo en este sector del mercado laboral continúa siendo bajo (probablemente no mayor a 5%) y la demanda de trabajo está en ascenso (moderado, pero, como se dijo, ascenso al fin)”.

Por otro lado, el poder de negociación de los sindicatos se sustenta también, tal vez más que antes, en su carácter de principal aliado político del Gobierno.

Fue este último el que estableció un umbral de alzas de salarios, no sólo para el sector público sino para el privado, al otorgar a los docentes un incremento escalonado de 23% para 2010.

El informe concluyó que los asalariados registrados privados apenas representan un tercio del empleo total, y los empleados públicos poco más de un séptimo adicional.

Ello, sin considerar que parte de este colectivo está fuera de convenio, difícilmente con posibilidad de obtener mejoras a la par del personal personal de convenio. /iprofesional